Ingredientes:
14 láminas de lasaña
4 lonchas de jamón york gruesas en taquitos ó 300
gr. en lonchas finas
250 gr. de queso en lonchas finas
25 gr. de mantequilla
1 cucharada de aceite
25 gr. de harina trigo
1 vaso de leche (250 ml. aprox.)
Sal, pimienta
Queso rallado para gratinar
Preparación:
Preparamos el jamón york en taquitos y el queso para tenerlo a mano para que
cuando vayan saliendo las láminas de la lasaña
ir haciendo el montaje de las capas. El queso, lo puedes tener en
taquitos o en lonchas, el resultado es bueno de cualquiera de las dos maneras.
Comenzamos con las láminas de la lasaña, en el
mercado las hay que no les hace falta cocción, pero luego tendrás que tenerla
un poco más de rato en el horno. A mi personalmente, me gusta más la
tradicional.
Para prepararla, ponemos una olla mediana con agua
con sal al fuego, cuando el agua comience a hervir le añadimos un chorro de
aceite y vamos poniendo las láminas de lasaña a cocer hasta que estén
blanditas. El tiempo dependerá del fabricante.
En una fuente de horno ponemos en el fondo una
cucharada de aceite para que la primera lámina de lasaña no se quede pegada.
Comenzamos poniendo una loncha de jamón york y otra de queso, sobre ella otra
lámina de pasta, así hasta completar y acabar con las láminas. Si utilizas una
fuente rectangular y pones un poco separadas las láminas del fondo te saldrán
dos raciones de lasaña individuales y así a la hora de servir parecerá que las
has hecho en recipientes individuales.
Una vez montada la pasta y el relleno preparamos
una bechamel. Para ello calentamos en un cazo o una olla no hace falta que sea
muy grande, una cucharada de mantequilla con la cucharada de aceite. Cuando la
mantequilla se derrita, añadimos el harina y removemos con una varilla, hasta que
se forma una especie de bola. Añadimos la leche poco a poco, salpimentamos,
seguimos removiendo y cuando se haya integrado todo bien, añadimos otro poco,
tiene que quedar una bechamel ligera que es mejor si la leche está un poco
caliente
Retiramos la bechamel del fuego y ponemos por la
superficie de la lasaña, añadimos una capa de queso rallado para gratinar y lo
metemos al horno a 200ºC, hasta que se dore el queso.
NOTAS:
Si te gusta mucho la lasaña puedes prepararla en
unos recipientes de aluminio individuales y congelarla en raciones, con su
queso ya por encima, el día que la vayas a consumir tienes que dejarla
descongelando en el refrigerador mínimo desde el día antes.
Si decides congelar en raciones no olvides poner la
fecha en que la cocinaste y de que ingrediente es la lasaña.
Si te gustan los sabores fuertes pon unos pequeños
trocitos de queso azul salteados entre las capas de jamón york y queso, te
sorprenderá el sabor cada vez que encuentres un trocito.
El relleno de esta lasaña es muy sencillo, pero es
muy recomendable para los que no hayan trabajado nunca con la pasta de la
lasaña, como al principio parece un poco engorroso siendo un relleno sencillo,
se le va “quitando el miedo” a este tipo de pasta.